La EaD.

 

 

 

El rasgo distintivo de la modalidad a distancia es la mediatización de las relaciones entre los docentes y los alumnos. La comunicación mediada en educación a distancia es el proceso educativo que se establece a través de los medios de comunicación, un nexo entre dos o más personas que tienen como fin construir conocimiento y acrecentar saber. Los medios de comunicación, en esta modalidad, no sólo facilitan y transmiten los mensajes informativos que deben recibir los estudiantes, sino que condicionan y modulan las comunicaciones entre los tutores y los estudiantes.

El proceso de enseñanza-aprendizaje se puede llevar a cabo tanto en tiempo sincrónico como asincrónico. La comunicación sincrónica se desarrolla en tiempo real, por ejemplo: la comunicación telefónica o el chat; la asincrónica se desarrolla en tiempo diferido y es necesario un lapso temporal entre la emisión y la recepción del mensaje, por ejemplo: el correo postal o el correo electrónico.

La asincronía, que no requiere participación simultánea de profesores y estudiantes, manifiesta otras grandes ventajas, tales como las de permitir la elasticidad de elección de contenidos, tiempos de estudio, apoyos alternativos, relación con otros estudiantes, etc. Cuando los procesos de enseñanza y de aprendizaje tienen lugar en modalidad a distancia, se debe instrumentar mecanismos que permitan a los alumnos estar en contacto con los saberes y potenciar los intercambios interpersonales. La construcción de estos saberes se funda en la interactividad: en la educación a distancia tiene lugar un diálogo didáctico de doble vía entre los docentes (o tutores) y los estudiantes separados físicamente unos de otros, en el espacio, en el tiempo, o en ambos a la vez. Este dialogo o interacción entre el que enseña y el que aprende se convierte, obviamente, en el elemento central de los procesos de enseñanza y de aprendizaje.

Algunos de los potenciales roles que puede asumir la comunicación mediada asincrónica en la modalidad a distancia son los siguientes

  • Comunicación entre formadores y estudiantes, y estudiantes y sus pares.

  • Acceso a recursos documentales y transferencia de información y contenidos.

  • Comunicación e información a nivel internacional entre instituciones educativas.

  • Aprendizaje colaborativo.

La red de prácticas discursivas que se producen en las comunicaciones asincrónicas a través del correo electrónico son mediaciones en las que se instala el proceso de interacción comunicativa, que debe retomarse luego para comprender el proceso de interactividad pedagógica de los materiales educativos o de las acciones tutoriales. Revisemos, ahora, el proceso comunicativo: la comunicación entre los seres humanos se realiza a partir de textos o discursos que se producen dentro de situaciones cambiantes y que condicionan a los interlocutores para que elijan qué decir, cómo decirlo y cómo organizar lo que dicen. Lo anterior supone que para que una comunicación sea eficaz o adecuada se deben desarrollar ciertas competencias o habilidades que conforman la competencia comunicativa. El concepto de competencia comunicativa comprende, a su vez, otras subcompetencias: lingüística, discursiva, estratégica, sociolingüística, sociocultural, pragmática, enciclopédica.